Una diputada bonaerense presentó una iniciativa para que no se permita la circulación por la zona urbanizada de todos los equipos utilizados para la aplicación de agroquímicos, plaguicidas o biocidas, excepto sobre las rutas nacionales y provinciales. Además prohíbe el transporte de estos químicos junto a productos destinados al consumo humano o animal, en una misma unidad de carga.
El proyecto, de sólo dos artículos y un tercero, de forma, aclara que sólo podrán circular por las zonas urbanas, cuando requieran de reparación y podrán hacerlo sin carga, desinfectados y sin picos pulverizadores y cumpliendo con todas aquellas medidas necesarias para minimizar los riesgos de contaminación en la zona de paso.
En sus fundamentos, señala que “El avance tecnológico sin igual en maquinarias de implementación; la amplitud de demandas en el comercio exterior; y la revolución genética de la producción cerealera, ha transformado rotundamente al mundo agropecuario”.
Pero la legisladora por la oposición alega que dentro de las ciudades se almacena y comercializa gran cantidad de productos agroquímicos, exponiendo a la población al contacto con los mismos de manera directa o aérea, con graves consecuencias para la salud, por lo que considera que “deben ser contempladas por nuevas normativas que regulen el uso y comercialización de los productos”.
Dentro de los argumentos, la legisladora Rita Liempe y autora del proyecto apunta que “los impactos del “modelo” no reconocen fronteras entre el campo y la ciudad con las poblaciones fumigadas en los territorios rurales y en las zonas periféricas de las ciudades. “En fin, una catástrofe socio-ambiental que hace agua por todas partes y que ya no permite “mirar para otro lado”, concluye.
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