El diputado provincial Ricardo Moccero (FPV) presentó un proyecto de declaración
para que se dicte la emergencia agropecuaria para todos los productores afectados por
las lluvias de los últimos meses y que, por esta razón, se prorroguen sus compromisos
bancarios.
“No pueden hacer frente a sus compromisos impositivos ni a la cancelación de sus
deudas bancarias”, señaló el legislador del Frente para la Victoria fundamentándose en
las continuas precipitaciones que han complicado las cosechas de girasol y soja -que se
hacen en apenas unos pocos distritos de la región- y también han impedido la carga de
cereal y de animales, por lo que productores agropecuarios.
“Además de la declaración de emergencia, que puede demorar algunos días,
necesitamos un decreto que prorrogue el vencimiento del impuesto inmobiliario, por
lo menos, por 60 días, hasta que los productores puedan levantar su cosecha. La idea
es que no pierdan el beneficio de buen contribuyente”, sostuvo Moccero.
Este proyecto se fundamenta en un informe de Iván Ullmann, de la Dirección de
Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, que analiza la campaña
sojera 2013/2014 en la mayoría de los distritos del SOB, donde se concluye que la
campaña se sucedió en un complejo entorno climático, caracterizado por un marcado
déficit de precipitaciones y elevadas temperaturas en la primera fase de desarrollo de
la oleaginosa y por excesos hídricos hacia el final del ciclo.
“Al evaluar los números de la soja total se aprecia un retroceso en las variables de
superficie (-17%, 475.000 toneladas vs. 575.000 Tns. de 2012/2013), rinde (-18%, 1.350
kilos por hectárea vs. 1.650 K/H) y producción (-33%, 635.000 toneladas vs. 950.000
Tns.)”, explica el informe y agrega: “El principal factor explicativo de este desempeño
es el clima”.
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