Luego de un intento fallido, la oposición impuso su mayoría y logró firmar dictamen a la media sanción del Senado que coparticipa el Impuesto al Cheque. Esta medida determina que esos recursos pasen directamente a las provincias como parte de la coparticipación. La Coalición Cívica, en tanto, firmó en disidencia.

El oficialismo, comandado por el diputado Alejandro Rossi (FPV-PJ-Santa Fe), se mantuvo firme en su argumento de que tal decisión produciría el desfinanciamiento del Estado. “El proyecto opositor es de dudosa constitucionalidad y tiene un marcado hilo conductor ideológico que pretende poner de rodillas al Gobierno para impedirle gobernar”, manifestó el diputado en el uso de la palabra.

En respuesta, el radical Juan Tunessi (UCR-Buenos Aires) ratificó que “lo que esta ley hace es reducir los márgenes de discrecionalidad existente. No hay desfinanciamiento sino un incremento en los recursos fiscales del Estado”. En tanto, la diputada Patricia Bullrich (CC-CABA) aseguró que “se está discutiendo la vuelta a un país más federal”.

Ante la negativa de Gustavo Marconato a convocar a la Comisión de Presupuesto y Hacienda, y previendo que no lo hará para tratar el tema, que resulta conflictivo para el oficialismo, el dictamen alcanzado tendrá que esperar el término de 30 días para poder llegar al recinto y convertirse en ley, ya que viene en revisión del Senado.

Lo cierto es que el dictamen de mayoría fue avalado por todos sectores contrarios a la Casa Rosada, aunque el bloque de la Coalición Cívica firmó en disidencia parcial. En este sentido, el diputado Adrián Pérez (CC-CABA), vicepresidente 2do de esta comisión explicó que “la intención de mi bloque es que se realice una rebaja gradual porque podrían correr riesgos los fondos del Estado nacional”.

Ahora el despacho pasó a la Comisión de Presupuesto y Hacienda, liderada por el oficialista Gustavo Marconato (FPV-PJ-Santa Fe), pero, según especulaban algunos diputados del grupo A, su tratamiento podría demorarse algunos meses.