Con una escasa presencia de senadores, representantes de entidades financieras aseguraron que la principal causa del problema de las salideras bancarias es “es la cantidad de billetes que hay en circulación, lo que indica el bajo nivel de bancarización existente”.

Con la mira puesta en la sesión prevista para el 29 de septiembre, donde se debatirán todas las medidas sobre seguridad, los senadores de las comisiones de Asuntos Constitucionales, de Justicia, y de Seguridad Interior convocaron a expertos y representantes de entidades financieras para avanzar en una iniciativa que legisle sobre el delito de las denominadas salideras bancarias.

Los textos en estudio son cuatro: la media sanción de Diputados; el proyecto del senador Juan Carlos Romero (Justicialista 8 de octubre-Salta); otro del senador radical Gerardo Morales (Jujuy) y una reciente iniciativa presentada por la senadora Ana María Corradi de Beltrán (FPV-PJ-Santiago del Estero). Dichos proyectos han recibido distintos giros y el objetivo es unificarlos en uno solo.

Benigno Vélez, gerente general del Banco Central de la República Argentina (BCRA), aseguró que “hay dos mil millones de billetes en circulación” ya que “el uso del billete está extendido”. Esto se debe “al bajo nivel de bancarización que hay en el país”. Por ello, para el funcionario “la mejor manera de atacar el tema de la inseguridad es con medidas a largo plazo, cambiando los agentes económicos” y tratando de “aumentar la bancarización, para lograr que la gente use menos dinero en el día a día”.

Vélez confirmó que “el BCRA ya implementó medidas de seguridad en las cajas y en los tesoros” y que se encuentra trabajando con el resto de las entidades, a las que el BCRA  les fija normas mínimas de seguridad.

Entre las medidas recientemente adoptadas por la entidad mencionó el cambio de la tecnología analógica a la digital en las cámaras de seguridad, la colocación de estos aparatos en las aceras, la instalación de inhibidores visuales en la línea de cajas, la colocación de administradores de colas a espaldas de la línea de cajas para evitar que los “marcadores” operen dentro de las sucursales y se aprobaron los cajeros de carga posterior en las sucursales. Aún está en estudio la aplicación de los inhibidores de las señales de celulares, lo cual está siendo analizado por los laboratorios de la Policía Federal.

Respecto a la media sanción que ya tiene el proyecto sobre salideras bancarias en Diputados, el funcionario del BCRA consideró que “el marco normativo del Banco Central, reflejado en la Ley Nº 19.130, cubre todo el espectro relacionado con la seguridad” y agregó que, “el proyecto de Diputados no modifica en demasía ese marco normativo ya establecido”.

A su turno, Mario Vicens, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), al igual que el titular del BCRA, destacó que “el nivel de bancarización es insatisfactorio” y que el problema de la seguridad bancaria está en el “monto de las transacciones que se hacen en efectivo”. Con respecto a la instalación de los inhibidores, Vicens expresó sus dudas ya que “su instalación puede perjudicar derechos de terceros con respecto a las comunicaciones y afectar la salud de los empleados y los clientes”.

Por su parte, el ingeniero Ariel Garbatz, coordinador del Proyecto Nacional de Seguridad y Teleinformática de la UBA y UTN, defendió el uso de los inhibidores de celulares en las sucursales. “Estos inhibidores no interfieren ningún sistema de alarmas ni de seguridad de los bancos” y agregó que ” un aparato para inhibir cualquier señal veinte metros a la redonda, dentro de un banco vale 239 dólares”. Asimismo, aseguró que “no es necesaria la inspección del laboratorio de Policía Federal” para el uso de los mismos.

El representante de las Entidades Bancarias de la Argentina (ADEBA), Norberto Peruzzotti, compartió el concepto vertido por el resto de los invitados, quienes señalaron que el centro del problema está en la baja bancarización. Al respecto, afirmó que “aún cuando se agregue más tecnología, el delito no va a desaparecer” ya que “mientras haya dinero en efectivo, el delito va a continuar”. En esta línea,  el presidente de la Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina (ABAPPRA), Juan Carlos Fábrega, señaló que “el problema central vinculado a la seguridad tiene que ver con la bancarización y con el manejo del numerario, tema que no está abordado con profundidad en ninguno de los proyectos”.