19.11.10. Después de años de cajonamientos y extensos debates, el proyecto sobre fertilización asistida obtuvo dictamen de mayoría en la Comisión de Acción Social y Salud Pública. Ivana Bianchi (Peronismo Fed.-San Luis) y Mario Fiad (UCR-Jujuy) presentaron sendos dictámenes de minoría. Ahora, el proyecto girará a las comisiones de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia; Legislación General y Presupuesto y Hacienda, para luego ser tratado en el recinto, en lo que ya se supone será el próximo año.
La primera en hacer uso de la palabra fue la diputada Ivana Bianchi (Peronismo Fed.-San Luis) quien explicó que en su pre-dictamen la técnica de fertilización será solo aplicada para la “infertilidad debidamente diagnosticada”, quedando afuera las parejas homosexuales. También su iniciativa propone que se puedan implantar solo tres embriones. Por otro lado, para poder ser beneficiaria de la técnica, la pareja con infertilidad deberá probar tener una relación estable de al menos tres años, ser mayores de edad y estar en edad reproductiva. “Me preocupa la vida de ese niño que pronto se puede quedar sin mamá”, adujo la diputada.
Respecto al tema más polémico de la temática, la criopreservación, la legisladora afirmó: “No estoy de acuerdo con la donación de gametos para evitar la comercialización y porque un hijo tiene derecho a saber su identidad. Y también prohíbo la criopreservación de embriones”.
El cruce de la jornada fue protagonizada por la diputada puntana y Silvia Majdalani (PRO-CABA), autora de dos de los proyectos conformantes del dictamen de mayoría. La diputada del PRO reiteró su apoyo al dictamen de mayoría y anunció que iba a contestar sobre algunas propuestas de su colega. Pero Bianchi saltó alterada diciendo que ella no estaba en esa sala para discutir sino para exponer su proyecto y que no le interesaban las objeciones de la diputada. Entonces Majdalani (PRO-CABA) optó por dirigirse directamente a Morante (FPV-PJ-Chaco), el titular de la comisión, y plantearle las objeciones a él ya que “a la diputada Bianchi no le importa la opinión de los demás”, sentenció.
“¿Cómo se sabe cuándo una relación es estable y por qué esperar tres años si la infertilidad se puede diagnosticar antes?”, afirmó la legisladora del PRO respecto del dictamen de minoría de Bianchi (Peronismo Fed.-San Luis). Por otro lado, señaló que la edad hasta la que se puede realizar el tratamiento debe fijarla cada médico de acuerdo a su paciente y que con respecto a la criopreservación de embriones “tenemos que pensar que una mujer de 40 años que ya no ovula como una mujer más joven logra producir una determinada cantidad de óvulos. La lógica es que esos óvulos conseguidos mediante un tratamiento con medicación se congelen ya que es riesgoso porque provoca embarazo múltiple”.
Por su parte, Mario Fiad (UCR-Jujuy), otro de los autores en minoría, aclaró que no era su intención obstaculizar el debate y que había realizado modificaciones al pre-dictamen presentado la semana pasada. Entre ellas mencionó la eliminación de la necesidad de que deba documentarse el padecimiento de un trastorno de la fertilidad para poder acceder al tratamiento; la modificación de la franja etaria, fijándola de los 18 a los 50 años. “El límite máximo de edad obedece a preservar la salud de la mujer y el interés superior del niño”, explicó el diputado. Fiad (UCR-Jujuy) aceptó también eliminar el principio prohibitivo para la donación de gametos pero sí sostuvo en su proyecto el requisito de contar con una pareja estable y la prohibición de identificar en los gametos los rasgos genotípicos, es decir, lo que propuso es “que no se elijan a los chicos como en una góndola de supermercado”.
Otra de las diferencias del dictamen de minoría del diputado jujeño respecto al de mayoría es lo referido a la cobertura por parte de las obras sociales. Fiad (UCR-Jujuy) propone que la cobertura se haga de manera progresiva para adecuar la demanda y atender principalmente a los grupos vulnerables de la sociedad. “Nos parece que la legislación debe tener la prudencia de contemplar los derechos de todos. Y no por atender estas técnicas debemos olvidarnos de los grupos más vulnerables que por ejemplo se enferman de dengue en el norte”, argumentó.
Al respecto, Majdalani (PRO-CABA) objetó el requerimiento de una pareja estable porque “en su vida privada cada uno vive como quiere” y remarcó que para ella la obra social debía cubrir el tratamiento para aquellos que padezcan infertilidad y no a cualquier persona que se lo quiera realizar. “Si abrimos la cobertura de manera ilimitada, no va a haber presupuesto y le estaremos quitando el derecho a una persona que está enferma”, manifestó.
El bloque del GEN manifestaron su apoyo al dictamen de mayoría, y la diputada María Luisa Storani (UCR-Buenos Aires), por su parte, propuso quitar el artículo que prohibía el alquiler de vientres ya que “es un tema para regular en la especificidad, en otro proyecto de ley. Majdalani (PRO-CABA) manifestó estar de acuerdo con el pedido. De esta manera, pasó a la firma el dictamen de mayoría en el que se incluye que las obras sociales y las prepagas deberán incluir en su PMO (Programa Médico Obligatorio) el diagnóstico, tratamiento y cobertura de medicamentos para la infertilidad.
Desde el equipo de trabajo de la diputada Silvia Majdalani (PRO-CABA) confesaron a Directorio Legislativo su satisfacción con la firma del dictamen “ya que esto nunca antes se había logrado” y “si bien hay mucho trabajo por delante, hemos dado un gran paso”. Además, el dictamen de mayoría consensuado contempla los dos proyectos de su autoría: el que propone incluir a la infertilidad (diagnóstico y tratamiento) en el PMO y aquel que apunta a regular las técnicas de fertilización humana asistida.