Entre el 15 y el 17 de junio pasado se llevó a cabo la Cumbre de Legisladores en el marco de Río+20, de la que participaron 300 parlamentarios de 85 países. Durante la Cumbre se debatió el rol de los poderes legislativos en la implementación de una agenda de desarrollo sustentable y se firmó un protocolo en el que se destaca que la implementación de los objetivos originales de la Cumbre de Río de 1992 se vieron dificultados por:
1. Falta de legislación que traduzca los objetivos planteados
2. Falta de estructuras de monitoreo de los objetivos planteados
3. Falta de participación y compromiso de los ministerios de economía y finanzas para sostener los compromisos en el largo plazo
El protocolo reconoce el rol de los legisladores en:
1. Elaborar, aprobar y supervisar la aplicación de la legislación nacional
2. Fiscalizar el desempeño de los gobiernos
3. Aprobar los presupuestos y las cuentas nacionales
4. Avanzar el enfoque del capital natural en el ámbito de los respectivos países
5. Fomentar el debate y la educación sobre el desarrollo sostenible con justicia social y respeto a la diversidad cultural
6. Promocionar la diplomacia parlamentaria sobre tema de desarrollo sostenible
Finalmente, los legisladores se comprometieron a:
1. Renovar el compromiso político con el desarrollos sustentable
2. Respetar el principio de no retroceso en derecho ambiental
3. Fortalecer la respuesta legislativa en sus parlamentos para atender a los objetivos de Río
4. Hacer avanzar legislación que integre el abordaje del capital natural
5. Ejercer un control más eficaz sobre los gobiernos en base a compromisos alcanzados en Río
6. Reunirse cada dos años en Río de Janeiro, Brasil a fin de:
a- Compartir buenas prácticas legislativas
b- Informar sobre progresos legislativos en cada país
c- Debatir nuevas estrategias internacionales para el desarrollo sostenible
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