En el primer encuentro de #DirectorioEntrevista, la Fundación Directorio Legislativo dialogó con el senador Rubén Giustiniani (FAP-Santa Fe) sobre la actualidad política, los principales ejes de la Comisión de Ambiente que preside y los proyectos que impulsa en el Congreso.

Algunas de las preguntas fueron realizadas por los seguidores de la cuenta @Dlsenadores, en instancias previas a la entrevista.

A continuación, reproducimos el diálogo completo:

¿Cómo ve la realidad política actual?

Desde nuestro punto de vista hay un problema serio y es que el gobierno ignora la inflación. Y segundo, vinculando la cuestión con la transparencia, preocupa la falta de estadísticas confiables; desde la intervención del Indec se ha privado al Estado de estadísticas que sean rigurosas, con lo cual es muy difícil el debate sobre cualquier política pública.
Estos son parte de los temas pendientes, se ha hablado mucho: década ganada, década perdida, yo prefiero hablar de las cuestiones pendientes que existen hacia adelante. Las medidas tomadas hasta ahora, son medidas que intentan bajar la fiebre; mantener por más de 4 años el nivel de inflación de dos dígitos no hay economía en ningún país del mundo que pueda ser sustentable. Esto significa el deterioro del poder adquisitivo del salario de trabajadores, jubilados, quienes hoy están en la economía informal.
Nuestro sistema tributario es un sistema regresivo que se asienta en un altísimo impuesto al consumo que es el IVA -que tributan los que menos tienen, los que menos ganan-. Nos parece una cuestión central porque hace a un país que tuvo un crecimiento a tasas muy altas durante muchos años y hoy muestra un signo de claro agotamiento, porque su gran pilar de sustentación que era su superávit fiscal ha desaparecido. Hoy ya estamos en rojo, las cuentas en rojo. Desconocer la inflación, establecer un control de precios de la manera en que se establece es absolutamente ineficaz y pensamos que medidas como eliminar el IVA de la canasta básica de alimento -que lo hizo Brasil hace unos pocos días, lo anuncio Dilma Rousseff-, nos parece que sería una medida estructural que sería quitar presión inflacionaria sobre los precios, y hacer justicia social. Y otra medida que pensamos que es estructural es gravar la renta financiera: quien compra un paquete de yerba o de azúcar cada 100$, 21$ son impuestos al IVA y quien hace especulación en la bolsa no paga ningún tipo de impuesto.

Suponiendo un escenario en que el FAP llegue al gobierno en el 2015, ¿qué medidas del gobierno dejarían y que medidas sacarían?

La Argentina habla mucho de la coyuntura y poco del mediano y largo plazo. Entonces estamos en una política de péndulo donde cada gobierno que llega tiene una predisposición para tirar abajo todo lo que el anterior hizo, sin rescatar absolutamente nada. Yo no comparto esa ley de decir “bueno, ahora si tenemos mayoría vamos a terminar con los malos…”, hablemos específicamente en qué temas.
Considero que es falsa esa contradicción planteada en un vocabulario de aceptar década perdida o década ganada. Digo, hablemos de temas en concretos, el matrimonio igualitario, eso es un gran avance positivo, la ley de muerte digna ha sido un paso absolutamente positivo.

¿La asignación universal por hijo?

Es totalmente necesaria, queremos que sea ley no un decreto de un gobierno que discrecionalmente aumenta o no de acuerdo a como quiera, esto tiene que ser una política de Estado. Yo tengo proyectos presentados de hace una década en el Congreso en cuanto a establecer un mínimo ingreso, un mínimo garantizado, como existe en todos los países desarrollados del mundo. Estoy totalmente de acuerdo, pero nunca que quede al arbitrio y a la discrecionalidad del gobierno de turno, por eso quiero que sea ley.

En el último tiempo hubo protestas contra medidas del gobierno y muchos de los análisis dan cuenta que la oposición no sabe cómo canalizar este reclamo, ¿qué lectura hace Ud., de cómo está actuando la oposición?

Primero que las movilizaciones las considero un hecho de madurez de la sociedad a 30 años de democracia. Me parece un hecho altamente positivo que la gente aprendió a manifestarse, a salir pacíficamente a la calle. Esto llegó para quedarse, esto es el avance del nivel de conciencia de las sociedades, esto no tiene nada que ver con los partidos políticos y me parece bueno que sea así, porque además es transversal.
Esa gente que se moviliza puede votar a un partido o puede votar a otro, me parece bueno que se exprese de esa manera y no creo necesario que esas movilizaciones espontaneas, masivas, ciudadanas, pacificas se etiqueten con el rótulo de un partido.

Paso al otro tema que lo considero secundario, el tema de la oposición. Nosotros no compartimos en primer lugar que exista “la oposición”, es decir que se pueda expresar en distintas maneras. Creemos que la experiencia historia demuestra que unirse todos los que están en contra -de un gobierno- para ganar una elección, primero, no es correcto y, segundo, no es eficaz. Hay que proponer un programa coherente para gobernar en ese sentido.

Por lo tanto desde el socialismo, FAP, unirnos con quienes podemos compartir un programa tiene límites. ¿Cuál es el límite? El programa de gobierno para proponerle a la sociedad. Me parece que se van perfilando distintas propuestas para el 2015 para que la gente tenga alternativas de gobierno claras y concretas. Creo que no va a haber una sola propuesta sino que el escenario es hoy muy dinámico. Quizás después de las elecciones de octubre tengamos liderazgos mas perfilados para saber cómo se puede presentar esto hacia el 2015.

-Ud. Impulsa un proyecto que tiene que ver con telefonía móvil, que es una problemática social que se ve en todos lados, ¿cree que se puede legar a aprobar una ley que la considera como un servicio público?

Lo que nosotros estamos planteando es una regulación con participación de los usuarios, de las provincias con un ente que sea tan independiente de las empresas como del gobierno. Esto es un criterio de los servicios públicos que no existe en la República Argentina y que venimos luchando hace muchos años. Es un problema de regulación democrática para que la luz, el gas y el agua funcionen correctamente.
Hoy el usuario es el último orejón del tarro, el usuario padece el abuso y no tiene ante quien quejarse, y tenemos las tarifas medidas en dólares por minutos como las más caras del mundo. Nosotros queremos que exista competencia, que exista regulación, que exista control por parte de la sociedad, entonces no es la lógica de estatizar el servicio de celular, sino regular en el sentido democrático. El ejecutivo eligió el camino de acordar con las empresas, eso es seguir dejando a las empresas que hagan lo que quieran.

-¿Cuáles son las prioridades en la Comisión de Ambiente, que Ud. preside?

La prioridad que hay en la Comisión de Ambiente es la política energética. Este es un hecho que no está en debate en la agenda política y nos parece que hay que introducir. Tenemos la materia energética en las peores, en el 90% con petróleo y combustibles fósiles y tenemos que cambiar esto. Fijar objetivos a través del análisis de las energías renovables, me parece que este es un capitulo fundamental. El otro capítulo fundamental es el cambio climático y la protección a nuestros mares.
La minería también es un tema de agenda social en la Argentina de hoy. Hay un reclamo de muchas sociedades; el tema es el agua como derecho humano, por eso esto toca muchos aspectos. Como adelanto les comento que van a venir a la Comisión a informar desde el IANIGLIA sobre el inventario de glaciares, aprovecho para invitarlos el próximo 26 de junio.

Área de Actualidad
Fundación Directorio Legislativo
directoriolegislativo.org
@Direlegislativo