La comisión de Agricultura y Ganadería de Diputados, presidida por el formoseño Luis Basterra (FPV), se reunió el pasado martes y debatió dos proyectos de ley sobre agricultura familiar. Con el gran apoyo de representantes de distintas organizaciones relacionadas con el tema y funcionarios del Ministerio de Agricultura que participaron del encuentro, se decidió unificar los proyectos vigentes, tomando el de la diputada Claudia Giaccone (FPV-Santa Fe) como base, para dictaminarlo en las próximas reuniones.

Desde el gobierno participó el subsecretario de Agricultura Familiar, Emilio Pérsico, quien apoyó los proyectos y sostuvo que había que aclarar dos cuestiones: la primera es definir un organismo de aplicación, que podría ser un instituto dependiente del Ministerio; en segundo lugar la creación de un fondo para que la norma cuente con un verdadero peso y no sea sólo “una expresión de deseo”.

Por su parte, Carlos Rubín (FPV-PJ-Corrientes), uno de los autores de los proyectos sostuvo que “toda ley puede ser un catálogo de buenas intenciones pero deben dejar los cajones” y expresó su deseo de unificar los proyectos. Por su parte, Claudia Giaccone (FPV-PJ), quien redacto el otro proyecto a ser tratado, también defendió la unificación y la creación de una ley consensuada.

En el año de la agricultura familiar y con la nueva secretaria nacional, Ángel Machuca, vicepresidente del Foro Nacional de Agricultura Familiar (FONAF), expresó la importancia de, además, crear una ley que regule esta actividad. Asimismo, Miguel Fernandez, presidente del FoNAF indicó que “hay que tener herramientas claras” y que “falta el compromiso de toda la Cámara de Diputados, porque todos comen y beben nuestros productos”.

La presidenta de la Asociación de Mujeres Rurales Argentinas Federal (AMRAF), Mónica Polidoro, sostuvo que “las mujeres estamos muy familiarizadas con la alimentación saludable que esta ley la fomenta”, y dijo que “las leyes hay que militarlas”.

Por otro lado, Benigno López, representante del Frente Nacional Campesino (FNC) mantuvo que “todos los sectores somos conscientes de que necesitamos un marco judicial para regular la agricultura familiar” y “debemos garantizar la soberanía alimentaria”.

La iniciativa de Rubín tiene la finalidad “de establecer un régimen jurídico especial para la Agricultura Familiar, valorizándola y protegiéndola como sujeto esencial de un sistema productivo ligado a la radicación de la familia en el ámbito rural, la preservación de cultura y formas de vida propias y como garante de la soberanía alimentaria”.

Mientras que, el proyecto de Giaccone contempla la adjudicación de tierras, la suspensión de juicios de desalojos por cinco años, y un sistema de comercialización de esta actividad. “Si bien mi proyecto cuenta con el aval de la Federación de Organizaciones de Agricultura Familiar (Fonaf), con el tiempo se fueron sumando objeciones que sería muy bueno que todos escuchemos”, aseguró la legisladora.

 

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