El próximo domingo se llevarán a cabo las elecciones ejecutivas y legislativas en Brasil. El candidato que más medía en las encuestas, el expresidente Lula Da Silva (preso desde abril por presunta corrupción), fue inhabilitado por la Justicia como candidato. A partir de ese hito en 2019, el escenario electoral se reconfiguró. Surgió como favorito en las encuestas, con un 32 por ciento de intención de votos, Jair Bolsonaro, proveniente de un partido pequeño que hasta ahora nunca gobernó Brasil. Sin embargo, lo sigue de cerca en la contienda electoral Fernando Haddad (23 por ciento de intención de voto), el reemplazo de Lula en su candidatura. Se espera que la disputa electoral tenga a estos dos referentes como principales actores.

En estas elecciones se medirán 13 candidatos a presidente, sin embargo todo indica que la contienda electoral se dirimirá entre Bolsonaro y Haddad. Se espera que Bolsonaro se imponga en primera vuelta, pero si la tendencia actual se mantiene, no reuniría el caudal suficiente de votos como para ser consagrado presidente. Ante esa situación, habría una segunda vuelta el 28 de octubre.

En este informe presentamos un detalle acerca de qué se pone en juego este domingo en la estructura política de Brasil que, además de elegir al presidente de los próximos cuatro años (contados desde el primero de enero), renovarán la totalidad de las bancas de la Cámara de Diputados y las dos terceras partes del Senado.